Habitación nº 2 ..."Miedo"...

Miedo...Llegamos a la habitación probablemente más misteriosa, oscura,arrinconada de toda la casa...

¿Quien no ha sentido miedo? ¿Quien no ha sentido miedo de algo...?

Tenemos miedo. Mucho. Aunque, extrañamente no lo reconocemos. Tenemos miedo de afrontar este.

Son muchos los miedos, me pasaría miles de siglos intentando explicar cada parte de uno de ellos. tenemos miedo. En cambio nunca decimos : "Tengo miedo". No queremos hablar , si acaso, lloramos. Dejamos que las lágrimas nos acompañen, solos ellas y tú. Nunca las mostramos.

Tenemos miedo. Miedo de empezar, de terminar...miedo de nada, miedo de todo...

Imaginaros...os despertáis en medio de la noche...y tenéis miedo, sin saber por qué.

Caminamos por un lugar oscuro y miramos a los lados, hacia atrás, temiendo a la nada.

La oscuridad nos da miedo. Mucho. Yo no entiendo por qué. La oscuridad nos acoge cuando estamos tristes. Tenemos miedo, y lo que hacemos es refugiarnos en la oscuridad, acurrucados en nosotros mismos. Entonces...¿por qué tenemos miedo de lo que nos da protección?

No podemos evitar el miedo. Es algo...humano. Si no tuviéramos miedo, no disfrutaríamos de lo bueno, no tendríamos corazón...lamentablemente no somos perfectos. Si lo fuéramos...¿qué sería la imperfección?
Dicen que hay que enfrentarse al miedo. Plantarle cara. Pero somos demasiado lo que llamamos "cobardes" para hacerlo...

Y va creciendo la incertidumbre, el miedo..el miedo de empezar un camino y de no saber continuar.

El miedo de decir: "Tengo miedo". Con un nudo en la garganta.

Uno de los miedos más profundos son los miedos a la verdad. Tememos la verdad. La verdad duele, y mucho. La mayoría de las veces no aceptamos la verdad, no aceptamos que las cosas no vayan bien.

Nos aferramos a una idea, a un ídolo. Nos aferramos hasta el punto de tener miedo, de perder todo aquello a lo alguna vez nos aferramos.

Tambien tenemos miedo de estar perdidos. Perdidos y de no encontrar la mano que necesitamos agarrar con fuerza, miedo de no encontrar esos brazos fuertes en los que llorar, miedo de no saber como salir de ese miedo.

Un miedo que supera todos los demás puede ser el "miedo" a nosotro mismos. Nos miramos en el espejo, "no me gusta lo que veo". Rompo el espejo, deseando que la imagen que antes se reflejaba también se rompa...

El miedo no es más que un sentimiento que nos clava estacas en el corazón. Es parte de la vida. Las personas cada vez son más materialistas y superficiales. Piensan en el "Final Feliz".Nadie. Nadie puede ser eternamente feliz. Se quejan de la vida, pero si no existiera, si esos sentimientos desaparecieran...¿qué nos quedaría?

El miedo no lo podemos barrer como el polvo. La "suciedad" de la vida no es algo que se pueda barrer. Lo único que podemos hacer es abrazar a alguien, y llorar, llorar, hasta que se encuentre el motivo de estas.

Las personas tenemos miedos. Miedos profundos. Yo tengo miedo. Tú tienes miedo. Y es algo con lo que hay que aprender a vivir.

Vamos saliendo con dificultad de la habitación...una habitación que deja huella, como el miedo. Hasta aquí os acompaño hoy.^^

Nos vemos en la próxima habitación.

P.d: ¿A quien muestro mis lágrimas?